MSD presenta al comité de innovación de IDIS los avances en el tratamiento de cáncer de mama triple negativo
El cáncer de mama es el tumor más frecuente en la mujer y se prevé que 1 de cada 8 mujeres en el mundo occidental serán diagnosticadas de este cáncer. Realizar un abordaje multidisciplinar y una correcta clasificación de los subtipos de este tumor, dada la implicación que ambos tienen en términos de supervivencia, es clave. Así se puso de manifiesto en la última sesión del Comité de Innovación del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS) y MSD. En este encuentro con miembros del patronato de IDIS, Mª José Vaquerizo, directora de Franquicia de tumores ginecológicos y mama de MSD en España, y Lucía González, jefa del servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid han destacado la necesidad de seguir investigando y de apostar por la medicina personalizada, tratamientos y estrategias de prevención y diagnóstico precoz para contribuir a aumentar la supervivencia en las pacientes.
Tras una breve introducción por parte de Mª José Vaquerizo, la doctora Lucía González, hizo una exposición en la que mostró los avances a lo largo de la historia en el tratamiento del cáncer de mama. En esta línea, explicó cómo se ha pasado del abordaje único con cirugía invasiva sobre el tumor mamario, pasando por la cirugía conservadora, la radioterapia o la quimioterapia, a la hormonoterapia e inmunoterapia, que se han convertido en opciones fundamentales para la individualización del tratamiento de cáncer de mama. Por último, hizo hincapié en la importancia del crecimiento del número de ensayos clínicos en cáncer, como principal área de investigación clínica.
Marta Villanueva, directora general de la Fundación IDIS, cerró la sesión señalando que “el diagnóstico de cáncer de mama suele tener un gran impacto a nivel personal, laboral y familiar. Por ese motivo, es fundamental aumentar el conocimiento sobre la enfermedad y sus posibilidades de curación, los tratamientos y las herramientas de prevención existentes para poder detectar casos en fases tempranas. Y, sobre todo, apoyar la investigación, como pilar esencial para mejorar las tasas de supervivencia y la calidad de vida en todos los cánceres, pero en especial en los de peor pronóstico”.